Si bien el proceso de búsqueda de la casa que necesitas es complejo y demoroso, no termina cuando encuentras la propiedad ideal, ya que el proceso de compra de un inmueble
recién comienza: los compradores hacen una oferta de compra, los vendedores contra ofertan, o aceptan, o se itera hasta llegar a un acuerdo que beneficie a todas las partes.
Una vez acordado, se formaliza mediante una promesa de compraventa, con garantías mutuas del 10% del precio acordado.
De esta forma, se avanza con los bancos y/o abogados para proceder a la recolección de los últimos antecedentes,
lo que permitirá ejecutar el estudio de títulos, que asegurará
que lo que estás comprando esté ajustado a derecho y no tengas problemas en el futuro.
El proceso continúa con las revisiones y firmas de escritura e instrucciones notariales por parte del comprador, vendedor e instituciones bancarias participantes en el negocio,
procediendo a las respectivas inscripciones en distintas instituciones del Estado, hasta llegar al pago y entrega material de la propiedad, resolviendo los habituales reparos que
surgen en el proceso, y entregándote reportes de avance durante toda la operación.